Los días 17 y 18 de mayo, la Asociación de Amigos de la Patagonia, junto a más de 100 voluntarios, técnicos del Parque Nacional Lanín y la comunidad local, llevamos a cabo una nueva plantación de árboles nativos para continuar con la restauración del único bosque de Araucaria araucana del mundo, ubicado a orillas del Lago Ñorquinco, en Neuquén.
Luego del incendio que afectó severamente al bosque en 2013, la labor en su conservación continúa con renovado ímpetu. Junto a técnicos del Parque Nacional Lanín, la comunidad local y decenas de voluntarios, plantamos 3300 nuevos plantines de árboles nativos, para continuar con la restauración de este bosque tan especial.
En esta ocasión, la actividad no sólo destacó por la cantidad de participantes y árboles plantados, sino también por la creciente participación de la comunidad local y figuras claves como la nueva intendenta del Parque Nacional Lanín, Monin Aquín, y los loncos de tres comunidades mapuches, Pedro Morales, de la Comunidad Currumil, Eloy Calfinahuel, de la Comunidad Ñorquinco y Daniel Salazar, quiénes se sumaron para conocer de primera mano la iniciativa y su impacto. Este encuentro fue especialmente simbólico, pues une esfuerzos de la tradición y la gestión actual para preservar el bosque.
Desde la ONG nos reunimos, junto a nuestro voluntarios, con el Parque Nacional Lanín, brigadistas del Sistema Provincial del Fuego, investigadores del INIBIOMA-CONICET, Protectores del Pewen, integrantes de la Comunidad Ñorquinco, responsables del vivero de Ruca Choroy, el Consejo Zonal Pewenche, la Corporación Interestadual Pulmari, la Asociación Pro Patagonia y la Dirección Provincial de Bosque Nativo de la Provincia de Neuquén, para llevar adelante la tarea.
La ventana climática entre dos tormentas de nieve, permitió que lleváramos a cabo la plantación en condiciones óptimas. A pesar de una nevada histórica 15 días antes, con acumulaciones de hasta 30 cm de nieve, el entusiasmo y la determinación de los voluntarios superaron los desafíos, con el sol radiante acompañándonos ambos días.
De los plantines puestos en el bosque, 3000 son de Araucaria araucana. Se sumaron 300 plantines de otras especies nativas: Notros y Maitenes, provenientes de los viveros Comunidad Mapuche Aigo y Pucará, ahora reposan en tierra para fomentar la diversidad biológica y promover el equilibrio ambiental.
La plantación se llevó a cabo en tres zonas estratégicas determinadas por los técnicos del parque, encargados de dirigir las tareas de restauración. Javier Sanguinetti y Nicolás Ferreyra estuvieron presentes dando indicaciones de plantación a los nuevos voluntarios.
Además, durante la jornadas, investigadores del CONICET brindaron charlas, que permitieron a los participantes conocer más sobre las investigaciones en curso, las características de la Araucaria araucana y las condiciones necesarias para su crecimiento.
Esta acción, séptima de la ONG en el territorio, y trigésima en su haber, es un testimonio del esfuerzo colectivo de los diferentes actores, con el apoyo de empresas como NISSAN, Kaiapuni o Carbon Neutral+, y la participación activa de las comunidades locales, unidos por un objetivo común: preservar el invaluable bosque de la Patagonia. Invitamos a la población a unirse a la causa, como voluntarios, donantes o suscriptores mensuales. La restauración del bosque de Araucaria araucana es una tarea a largo plazo, pero cada acción nos acerca más a la meta.
Juntos, estamos asegurando que las futuras generaciones puedan disfrutar de la belleza y la biodiversidad del bosque patagónico.
Desde el 2018 realizamos plantaciones en distintos puntos de la Patagonia y en apoyo a la Reserva Natural Pilar.
